Reflexiones

 Es que yo necesito la fuente de inspiración inagotable, la introspección, la expectativa, el misterio y la incertidumbre para poder inspirarme, de otro modo mi vida no tendría material cómico ni trágico para el entrenimiento colectivo.

Han pasado cosas tan distintas, cosas que me han hecho cuestionar, priorizar, valorar e incluso huir. Todas y cada una en su propio espacio de tiempo, un mes, una semana, 6 meses...

¿Por qué me gustan los años pares? siento que pasan cosas muy interesantes cuando los números son divididos entre dos, porque sucede todo lo bueno y todo lo malo pero potencializado.

Hablando de dos, resulta que ahora tengo dos trabajos, bueno, 3 considerando que también continuo con mi tienda, además empecé a escribir comedia y también me atreví a hacer más amistades.

Yo dije que este era mi año, pero creo que el destino exageró, me ha hecho reaccionar a una tras otra, sin descanso, sin tiempo para sentarme y admirar el paisaje, solamente llegan los aprendizajes y retos, como si estuvieran haciendo fila, viendo como me defiendo de un por uno, algunas veces victoriosa, algunas otras veces rendida y cansada de mis adversarios.

Mi vida por ahora se ha vuelto el sonido del teclado, escribiendo todo el tiempo, a veces para mi, a veces para personas que no conozco y que en algunos casos me desagrada.

Lo único constante es el cambio, y ha sido un duelo tras duelo, una serie de pérdidas y recompensas, aunque en algunos casos los vacíos se sienten como perder un mundo en un abrir y cerrar de ojos.

No estoy segura de prácticamente nada, y cada día es algo distinto de alguna manera, y yo trato de hacer las cosas lo mejor posible, o pon tú que no, pero al menos ya desde un plano mental en donde debo estar yo primero.

Siento que he madurado en muchísimos aspectos, no me siento la misma persona ni siquiera de cuando inció este año, creo que me he sigo conociendo, él porqué he reaccionado como lo he hecho, las decisiones que he tomado, las personas con las que me he relacionado, lo que busco y a dónde quiero dirigirme.

Al menos puedo sentirme orgullosa de haber logrado lo que dije que haría hace dos años, cuando mi camino se había desviado y estaba desesperada tratando de sobrevivir.

En este momento solo trato de mantener la vida a la que me he acostumbrado, y sé que sigo fallando mucho, aún me falta demasiado por recorrer hasta sentirme completamente orgullosa, pero mira, al menos sé que no estoy en el mismo lugar dando vueltas y llorandole a las mismas personas.

Tengo opciones, tengo la experiencia, tengo muchas cosas buenas, sé hablar, sé que decir, tengo las herramientas para inventarme el futuro, y de alguna manera lo he de lograr como todo lo que más o menos me ha salido bien.

Hay rubros que me gustaría cubrir, sin embargo creo que ahí todavía me falta muchísimo por comprender de mí misma, sobretodo me hace faltar ciertos temas que aún duelen, porque la herida ha tardado mucho tiempo de caer la costra y regenerar la piel nueva, porque a mi me lastima, me causa escozor y quiero rascar hasta que vuelva a sangrar, y ese proceso se repite hasta que la cicatriz quede horrenda, y deba llevarla a todos lados.

Portaré esa cicatriz como prueba de que sobreviví, y no debo avergonzarme, porque es prueba de mi valentía y mi fuerza.

Sé que voy a mi propio paso, construyendo mi camino a cada paso, no tengo idea de a dónde me dirijo, pero seguramente lo descubriré después, cuando deba, por ahora solo me queda disfrutar el paisaje, si es que hay uno.

O pon tú que no.