sábado, 20 de diciembre de 2014

Obsesión Infinita #4

Hoy fue un día largo, muy largo, mantuve la misma cara, mis ojos se veían muy pequeños hoy.
Pero, descubrí algo, más bien, redescubrí algo, estoy sola y no por eso soy vulnerable ni voy a dejar de hacer las cosas que me dan felicidad.
Fui al museo, tenía ganas desde hace tiempo de ir sola, de disfrutarlo, y disfrutarme.
Tuve que esperar miles de horas y hacerme tonta ahí para pasar a ver la expo de Yayoi Kusama, y mientras rondé todo el edificio como un ente gris esperando su turno para llenarse de color.
Vi otras dos exposiciones, una llamó mi atención particularmente, se llamaba "Take care of yourself" de Sophie Calle, una artista francesa, esta expo tocó fibras sensibles de mi, porque según la premisa de esta galería, la mujer recibió un correo de su pareja donde este le decía que las cosas no estaban funcionando y que es mejor alejarse, pero que se cuidara. Me sentí tan identificada que pude sentir la desesperación de esas 107 mujeres que también leyeron la misma carta y que dieron su opinión al respecto. Al principio pensé que se trataba de mujeres pensando demasiado a algo que era un punto final, pero no, las mujeres siempre pensamos todas las probabilidades, todos los mensajes ocultos, leemos entre líneas, y NO esta mal hacerlo, porque nos creamos historias de donde aferrarnos, y así decidimos sufrir o no.
Entré antes de mi hora a la expo que quería ver, y qué puedo decir de Yayoi?, es una mujer muy compleja, abstracta y hasta cierto punto enferma, me recordó a Björk, porque es una persona que se involucra hasta el último termino en su arte.
Por un momento olvidé mi soledad, olvidé que "me siento mal", se me olvidaron mis ganas de llorar, olvidé mi dolor de cabeza, mi estómago vacío, mi cansancio de la noche anterior, me olvidé de todos, por un momento me volví parte de esa obsesión infinita, parte de su desesperación, su lucha contra su complejo. Yayoi me enseñó algo valioso este día, que mis obsesiones me hacen la persona que me define, mis problemas, mis fantasmas, todo lo que conforma mi mente y mi esencia no tiene que ser algo negativo, y siempre debo de encontrar la manera de convertir mi sufrimiento en algo hermoso, en aprendizaje, en algo que los demás vean y proyecte lo que puedo dar a pesar de mis sentimientos ocultos, esta mujer de verdad que esta enferma, pero en vez de esconderse, se rebeló contra todos la que la tachaban de loca, y ahora es una persona importante, ejemplo para muchos, al menos hoy se que tengo una Yayoi interna que de alguna manera debe de crear flores hechas con lágrimas. Tal como ella lo hizo.


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