Ni uno ni tres ni cinco años, cuando no hay nada entonces no hay nada, y no importa si te quitas, no importa si te pones, es como arena que se acumula en un reloj, es mejor darle la vuelta y que comience a caer de nuevo.
No estoy equivocada, aquí algo sucede con la gente,
hay personas podridas, y me siento mal por ellos.
Abrazo mi soledad, solo somos ella y yo.
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