domingo, 12 de junio de 2016

Rompeolas

Estoy a menos de una semana de cumplir 25 años.
Ya saben lo que dicen, ahora voy en una carrera acelerada hacia los 30.
Qué voy a hacer ahora?
No dejo de pensar en las cosas que me gustarían hacer y también me aterra que las cosas cambien.
No se en qué voy a trabajar, no se si seguiré acompañada o si algún día dejaré de sentirme sola.

Ya te veo con diferentes ojos, te veo como el ser humano que eres, ni más ni menos,
una isla donde descansa mi barco, solo eso, un faro que alumbra de noche.
A los piratas los aprendí a ahuyentar yo sola, los agujeros de mi barco estoy aprendiendo a taparlos.
Pero sola, porque de ti solo es tierra firme para agarrar valor.

Todos los dichos son muy ciertos, me voy dando cuenta uno a uno de las cosas que se dicen.
El tiempo me ha hecho una persona dura, pero en el interior sigo siendo blanda,
cuando dejo ver mi interior solo es por un momento, quizá no sea mi totalidad,
quizá estoy cansada de seguir encerrada dentro de mi armadura.
Me estoy portando de la mejor manera, estoy siendo una hembra lo más racional posible.
Pero es que aún me siento atada, aún no se qué decir y qué hacer para estar totalmente cómoda.

Me encanta sobre-pensar las cosas, porque no recuerdo un solo momento donde me diga "oh wow, soy especialmente feliz con las cosas que tengo, con los amigos que me rodean. Soy feliz con mis logros, estoy feliz conmigo y todo estará bien".
No recuerdo levantarme optimista y creer que todo va a estar especialmente bien.
Ahora espero lo peor, es como si estuviera a la espera de cosas malas.
Porque así soy yo, porque así decidí serlo y no recuerdo en qué momento empecé a ser así.

Tengo muchas cosas en qué pensar, solo espero poder salir adelante.
Superar estos baches, encontrar la paz, ser feliz conmigo, decidir mejor qué es lo que debo hacer,
a quienes debo de conservar y a donde debo moverme.
Amo el barco en donde estoy navegando desde hace años, es solo que a veces me encuentro yo sola
y he visto pequeñas tormentas que me hacen llorar.
Me he encerrado, física y mentalmente y no se si hago las cosas bien para poder permanecer con personas buenas en mi vida.

Quizá soy una solitaria que cree que debe estar acompañada, pero no se como serlo.
He pedido ayuda, he querido hablar de esto pero tengo miedo de ser juzgada,
que las demás personas crean que solo quiero llamar la atención.
Y creo que es cierto.
Quiero integrarme pero no se como comenzar, y no quiero recibir un "relájate, todo estará bien",
porque ningún hecho me garantiza que las cosas estarán bien.

Hablo en todos los sentidos, en mi trabajo, en mi independencia, en mi novio, en mis amigos, en mi familia, en todos esos factores que determinan si estado de ánimo.

Tengo 24 años y no se porque me siento como una señora que ha vivido durante mucho tiempo.
Hubo algo en mi que se rompió y creo que nadie está listo nunca para este tipo de cosas.

Quiero vivir un momento sin estar preocupada, absolutamente de nada, es más "daría mi cabello" por estar totalmente tranquila, no tener tanta ansiedad y dejar de llorar por todo, todo el tiempo, sola.

No se porqué empecé a divagar tanto, iba a escribir de una cosa totalmente diferente, pero ya no tengo ganas de hacerlo, perdí el hilo del tema aquí.

Voy por otro año, mejor me tiro al mar y espero a estrellarme en el rompeolas.






1 comentario:

  1. Vaya pedazo de mujer que eres, dí con tu blog por casualidad y me he enamorado de ti en muchos aspectos. -Salvo tu negatividad inmensa-. Pero quiero suponer que es por falta de algunas cosas en tu vida. (Aún no me empapó con la mayor parte de los aspectos de tu vida) Y por lo que he leído es super interesante lo que aportas en ocasiones en tu blog. Desconozco si te propongas seguir con el. Pero espero que si. Es curioso leer de vez en cuando, historias, aventuras y pensamientos como los tuyos. Sigue así. Saludos.

    ResponderEliminar