lunes, 1 de enero de 2018

Nuestro parque en la noche

No tengo resoluciones para este año, solo planeo sobrevivir otra vez
La verdad des que no me recuerdo sola, pero si recuerdo las cosas que no debo volver a hacer.
Ya no planeo sentirme triste y abandonada.

No me gusta estar con personas, no me gusta el ruido, las charlas sin sentido, el sonreír a los extraños.
No me gustan las personas que son así de sociales, me dan desconfianza.
No me gusto yo, ni querer agradarle a los demás.

Quiero leer libros otra vez
Quiero cambiar de trabajo
Quiero comprarme zapatos
Quiero ir a comer sola

Necesito estar en paz, sin estresarme todo el tiempo por cosas que no puedo controlar.
Necesito dejar de fingir que me gusta la vida que he llevado de un par de años para acá.
Necesito salir de mi zona de confort, de mi circulo vicioso que únicamente me lastima.

Se que si regreso, volveré a cometer los mismos errores de siempre, volveré a ser exactamente la misma persona.
Ya no sé si debo ser egoísta, mezquina con mis sentimientos o si debo apartarme un rato de todo ese ambiente que me fastidia.

Me siento cansada.

Hace unas horas, cuando dieron las doce campanadas que marcaron el año nuevo, lo único que pude sentir fue un terrible nudo en la garganta y muchas ganas de llorar.
Porque miro en retrospectiva y me doy cuenta de todo lo que me hubiera gustado ser, y de las decisiones que pude haber hecho.
Pero como diría mi mamá "el hubiera no existe, la vida no es justa".

Hay miles y millones de personas que sufren problemas a diario y que aún así, son más fuertes que yo. Eso me desanima, es como si yo fuese la única persona que sufre de manera imbécil.

Tengo que cortar con todo esto de una buena vez.
Y ya pediré ayuda, de todos modos, nadie ha respondido.

No hay comentarios:

Publicar un comentario